Declaración FEL-Chile ante las nuevas reformas educativas anunciadas por el gobierno

Ante las medidas educativas anunciadas por el gobierno y frente a la "Gran Reforma en Educación" que pretende implementarse el 2011, el Frente de Estudiantes Libertarios de Chile declara:

1)                 Que enfrentamos una nueva arremetida en materia educativa que viene expresándose de diversas maneras: en el cierre y fusión de  establecimientos municipales por todo chile; en la disminución de horas de historia y ciencias sociales en las escuelas; en la precarización del estatuto docente; entre muchas otras. Asimismo se gesta el traspaso de los aportes fiscales de libre disposición a convenios de desempeño en las universidades del CRUCH,

el aumento del crédito con aval del estado en desmedro del Fondo Solidario, el aumento de incentivos para los sostenedores de colegios particulares subvencionados, el desmantelamiento de la educación municipalizada para que los particulares y subvencionados puedan llenar este vacío, instalando lógicas meritocráticas donde el aumento de salario a los docentes y los beneficios como la gratuidad a estudiantes de “excelencia”, que deberían ser un derecho de todos, solo constituyen el manto con que se cubren los intentos de desmembrar la protesta social y  lucha del gremio para defender sus conquistas, entre otras medidas.

2)                 Estas medidas plantean la privatización como solución a la crisis en la educación, la cual debe ser funcional con los intereses económicos de los poderosos que ven en ella nuevas instancias de donde generar ganancia. Por tanto estas no son problemáticas aisladas, sino un ajuste político que se busca implementar en todos los niveles. En este sentido las problemáticas, presentadas como coyunturales sólo son un ajuste del modelo que fue implementado en dictadura y perfeccionado durante los gobiernos de la concertación. Esta estrategia pasó por la privatización de la educación estatal, su desmantelamiento y ahora por la integración de lo que quedó al sistema privado.

3)                 Dicho ajuste es coherente y funcional al modelo económico y social imperante, y busca adecuarse a los intereses de la clase dominante y a sus planes estratégicos en materia económica y de gubernamentalidad, particularmente para el empresariado al permitirle generar mano de obra más sumisa, capacitada en función a criterios de competitividad, productividad y resultados. Así se explica la pretensión de disminuir asignaturas como historia y ciencias sociales –como hace años se hizo con filosofía-, tomando en cuenta que éstas últimas podrían, en potencia, fomentar un espíritu crítico y valores sociales más humanos, que no son medibles ni útiles  para el capital.

4)                 En este marco, es fundamental instalar el verdadero tono del conflicto, que sobrepasa con creces las lógicas gremialistas y de corto plazo, para lo cual es vital poner las demandas en su contexto; qué modelo de sociedad queremos y por tanto qué educación necesitamos. Por lo anterior, es imperativo dar un giro en las lógicas de movilización articuladas hasta la fecha, pasando de la resistencia a la privatización y defensa de la educación “publica” hacia discutir e instalar orientaciones mínimas para crear un nuevo sistema educativo, basado en nuestras prioridades como pueblo y por ende capaz de entender la educación como un derecho social y no un bien adquirible por tal o cual suma de dinero.

5)                 Debemos entender que la privatización de la educación ya está materializada y que de nada sirve defender el sistema actual. Y que hoy, cuando se busca profundizar y perfeccionar el modelo, nuestras fuerzas deben ir apuntadas, tanto a rechazar y frenar las medidas que hoy se han anunciado, como ir desde hoy planteando la necesidad de un Proyecto Público Educativo, donde la educación sea tomada como un derecho social que materialice las aspiraciones históricas del movimiento popular, que se construya a partir de las propias necesidades y experiencias de lucha de los distintos sectores sociales y que esté al servicio y control del pueblo. En definitiva, una Educación transformadora y contraria al modelo económico y social imperante.

Sabemos que la tarea es enorme, por lo tanto el llamado es a construir organizaciones y planes de lucha de largo aliento, convocando a  los distintos sectores sociales, que hagan posibles nuestros objetivos y construyan poder popular contra el Estado y el Capital.

Por una educación al servicio del pueblo.

¡A Crear una educación, pública, gratuita y popular!

¡Arriba los y las que luchan!